lunes, 18 de junio de 2012

¿Defensores de la vida?




"Tenemos que terminar este amorío con el feto y comenzar a preocuparnos por los niños"


-Joycelyn Elders (1933), pediatra estadounidense





Si se dice que la vida es sagrada, o que todo embrión tiene la obligación de nacer y vivir. Entonces las circunstancias por las que se concibe, debieran de ser irrelevantes para la integridad del mismo.

Aclaro esto, dado que muchas personas, pensando ellas que “defienden la vida” Están en ocasiones a favor del aborto cuando el embarazo sea producto de una violación.

Si se defiende la obligación de la madre para la “vida” del embrión, entonces que sea una violación o una calentura debieran de considerarse sin importancia. Pareciera que estos “defensores de la vida” se sienten jueces y quieren castigar a la mujer ignorante o descuidada haciéndola pasar por un embarazo que no desea. En tanto que a las mujeres violadas, se les tiene consideración, son comprendidas y por lo mismo, no son “castigadas”.

¿Realmente deberíamos de considerar la maternidad como un castigo? Personalmente creo que eso sería una aberración. A algo tan noble, se le quiere volver obligación, aún cuando no se desea. Todo con la engañosa primicia de querer “defender la vida”.

Estos autoproclamados “defensores de la vida” no saben, o no quieren saber que lo que ellos defienden es solo una parte de un problema mayor. Obvian lo obvio. La mujer, la familia que la acoge, la comunidad, la ciudad, etc. De mayor a menor medida son afectados.

Un humano para desarrollarse sanamente, necesita de ciertas consideraciones, consideraciones que son uno de los regalos más importantes que una persona es capaz de dar.

Si estos cuidados no son tomados en cuenta como parte fundamental del desarrollo de un humano, y son sólo una cuestión secundaria, la vida del futuro humano será desdichada y desafortunada en el mayor de los casos.

Y esto, no es un problema hipotético, es un problema en concreto: claro y específico.

Un niño no deseado o planeado traerá consecuencias sobre la situación económica y emocional de la mujer que no lo esperaba. Se puede argumentar que estos serán problemas difíciles, pero no imposibles. Y estoy de acuerdo con ello, pero la situación no es de si se puede o no se puede. No debe de abordarse esta cuestión como una situación aislada. Por el contrario, también es necesario considerar sus consecuencias a un nivel social. Es aquí donde fallan nuestros “defensores de la vida”, quienes no se acuerdan de las personas que nos rodean. ¿De qué nos serviría traer más personas al mundo si no somos capaces de preocuparnos por los que ya están? ¿En serio somos tan ingenuos que creemos que por proteger el embarazo hasta la concepción estamos defendiendo la vida? ¿Y después?

viernes, 20 de abril de 2012

Voto responsable


Dentro de una nación moderna, se ejerce la democracia. La participación del pueblo en la vida política del país, el pueblo, como es bien sabido, elige a sus representantes, gobernantes, pero primerisímamente a sus servidores públicos. Servidores públicos, que como su nombre claramente indica, tienen por objetivo servir al país.

Para que el país mejore, avance, se desarrolle, es necesario contar con dirigentes conscientes, capaces, comprometidos y responsables. Y esto solamente se puede alcanzar por medio de la elección popular. El pueblo necesita estar consciente de sus necesidades. ¿Qué es prioridad y qué no lo es? Votantes informados son los que le exigirán realmente a la clase política candidatos aptos para la dirección del país.

Sin embargo, ¿qué podría considerarse un votante informado? ¿qué es pues un ciudadano responsable y dispuesto a ejercer de su democracia, y más importante aún, de su compromiso como ser humano racional y bondadoso para con sus semejantes?

Un voto consciente es responsable, racional y bondadoso. Y a este tipo de voto, es el que se debe de comprometer todo ciudadano.

¿Cómo podríamos llegar a una definición que englobe todas estas características?

Esa ha sido la pregunta que me hago con frecuencia, y la cual trato de responder. ¿Mejores propuestas? ¿Mejores discursos? ¿Respuestas asertivas a entrevistas importantes?

¿En qué aspectos debiese de basarme para acercarme más a ese voto consciente?

Las propuestas, discursos, entrevistas o afiliaciones partidisticas son aspectos muy importantes, y de los cuales no debiesemos de escatimar importancia. Sin embargo estos fallan como base para considerar acciones post electorales.

¿Cómo podremos saber qué ‘x’ candidato cumplirá sus propuestas? ¿Qué certeza tenemos sobre las respuestas de ‘x’ candidato en tal entrevista? ¿Estará acaso convencido de sus principios e ideales que presume en su discurso?

Lector, lamentablemente no podemos saberlo con certeza.

Pudiesemos caer en el error de confiar en algún candidato por su habilidad para hablar y responder preguntas. Infinidad de puntos por los que podríamos confiarnos, y aún así no tendríamos una certeza lo suficientemente razonable como para considerar realmente ciertas sus intenciones.

Es aquí, en la búsqueda de un punto de apoyo, de una evidencia que nos ofrezca claridad, donde entra la investigación pura y dura de nuestros candidatos.

Pero ¿qué clase de investigación? La investigación que nos ocupa, es una que tiene por objeto encontrar la congruencia.

El pasado de los candidatos.

Tan simple y tan claro como eso. ¿Cuáles fueron sus propuestas en las campañas anteriores? ¿Cuáles cumplieron? ¿Con qué clase de gente se rodearon? ¿Gente capaz o simples familiares y amigos? ¿Actuaron de acorde a sus principios ahora tan defendidos?

Porque al final de cuentas no hay que perder de vista que estamos eligiendo a un gobernante que necesita ciertas aptitudes, y estas solo podrán ser conocidas por su desempeño como lo que fue: un gobernante.

La apariencia, los discursos, propuestas o entrevistas, como anteriormente dije, son importantes, si, pero solo nos hablarán de una forma un tanto superficial del candidato. Estos rubros deberán de ser dejados a un lado para cederle el protagonismo a sus aciertos y desaciertos en el pasado.

Por lo tanto, concluyo esta reflexión con lo siguiente:

Amigo lector, ciudadano y votante

Escucha y estate atento a cada uno de los candidatos, a sus propuestas, entrevistas y discursos... toda fuente de información. Pero como prioridad lo más razonable será el análisis y evaluación del pasado de los candidatos. Porque así, y solo así, tendremos una imagen más concisa y transparente de quién podrá llegar a ser, nuestro futuro presidente.